Cátedra Paz, Seguridad y Defensa

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Observatorio PSyD

El observatorio opina

12 de Junio de 2013

Una rueda oscura pero esencial

Col. Carlos Calvo González-Regueral
Jefe del Estado Mayor. Brigada Logística

Podemos concebir una operación militar como una gran rueda que es dirigida por el jefe de la operación que concibe, prepara y conduce su movimiento. Si la operación está bien concebida, diseñada y dirigida un observador ajeno podría concluir que se trata de un mecanismo sencillo sin percibir su complejidad interna. Porque, efectivamente, no se trata de una rueda simple. Nuestra rueda es una rueda dentada en su interior que integra diferentes engranajes.

Los principales de ellos son, evidentemente, las unidades de maniobra, sin las cuales nuestra rueda no tendría ningún sentido. Son las que realmente cumplen la finalidad y ejecutan el movimiento; es decir, la acción militar sea del tipo que sea. Pero, a su vez, Éstas se apoyan en otras ruedas auxiliares, cuyo papel es capacitar a las unidades de maniobra para que su cometido se realice de la forma más efectiva posible. Esas ruedas auxiliares son de tamaño variable y, aunque su funcionamiento es importante para el conjunto, sin alguna de ellas la rueda puede girar aunque lo haga con mayor dificultad. Sin embargo, entre ellas hay una sin cuyo funcionamiento no es posible el movimiento. Es una rueda grande, pesada, escondida y oscura que conecta al conjunto con el exterior y a su vez asegura el funcionamiento de todas las ruedas auxiliares y, en definitiva, del conjunto. Esta rueda es la Logística.

En efecto, las unidades militares, las ruedas de maniobra y las auxiliares, no pueden funcionar sin Logística ni en paz ni en operaciones. El General británico Sir Peter de la Billiere[1] asegura que en la guerra del Golfo de 1991 hubo tres pilares básicos sin los cuales no hubiera podido alcanzarse la victoria: diplomacia, liderazgo de los mandos y apoyo logístico.

En la estructura actual del Ejército de Tierra español la Brigada Logística (BRILOG), encuadrada en la Fuerza Logística Operativa, juega un papel fundamental como rueda oscura y escondida para asegurar el funcionamiento del conjunto tanto en territorio nacional como en operaciones.

Se trata de una joven Brigada, creada en 2011, con un amplio despliegue extendido a lo largo de toda la geografía nacional. Su Cuartel General y una de sus Agrupaciones se encuentra en Zaragoza y cuenta con unidades en Huesca, Barcelona, Madrid, Valencia, Albacete, Toledo, Sevilla, Córdoba, Granada, Almería, Valladolid, Burgos y Canarias en alrededor de 30 instalaciones. Su misión principal es encuadrar, adiestrar y equipar unidades logísticas desplegables para ser empleadas en el apoyo a las operaciones militares que realizan o tengan que realizar las unidades del Ejército, tanto en operaciones específicas como en el marco de operaciones multinacionales.  En el entorno de esta misión general que le asigna la normativa vigente, la actuación de la Brigada Logística se fundamenta en dos pilares fundamentales. Por un lado actuando de forma permanente en territorio nacional, garantizando el apoyo que necesitan las unidades, y por otro lado y entrando en el ámbito más operativo la BRILOG se encarga de alistar, adiestrar y evaluar a los contingentes logísticos que despliegan en operaciones. Desde este punto de vista las Unidades de la Brigada conforman un conjunto que ha participado en todas las operaciones exteriores en las que nuestras Fuerzas Armadas se han visto inmersas en los últimos 25 años.

En el apoyo en territorio nacional la Brigada Logística desempeña un importante papel en la  dirección a su nivel y, sobre todo en cuanto a ejecución  y control en el conjunto del sistema de apoyo logístico del Ejército y mantiene relaciones orgánicas en el ámbito de la Fuerza Logística Operativa y funcionales con el resto de autoridades del Mando de Apoyo Logístico especialmente en las funciones de abastecimiento, mantenimiento y transporte.

Por su concepción la BRILOG, con sus cinco Agrupaciones de Apoyo Logístico, como elementos de ejecución, proporciona un valor añadido al conjunto mediante diversas actividades que permiten la unificación de procedimientos, el establecimiento de apoyos mutuos, la gestión de información logística y el análisis de capacidades disponibles para satisfacer la demanda de las unidades apoyadas. El esfuerzo principal en este sentido es obtener una mayor integración, coordinación y control de las capacidades de las unidades que integran la cadena de ejecución del sistema de apoyo logístico a los diferentes niveles.

El impulso de los Centros de Integración y Control del Apoyo Logístico (CICAL), el planeamiento y programación de las diferentes actividades logísticas a través de un programa anual específico (PROAL – Programa de Actividades Logísticas), el conocimiento de los entornos de actuación de las unidades ejecutantes o la ejecución de proyectos especiales en actividades relacionadas con abastecimiento de munición (clase V) son claros ejemplos de lo que la BRILOG proporciona tanto a nivel cadena de dirección como en cuanto a ejecución y control.

Este esfuerzo de integración, coordinación y control al que aludimos permite una ventaja adicional que es especialmente crítica en las condiciones actuales, como es el obtener el máximo rendimiento de los recursos disponibles, que siempre serán escasos, en búsqueda de una eficiencia que nos es exigible en tiempos de paz.

En operaciones, sin perder de vista la eficiencia, debemos ser sobre todo eficaces. Y en la búsqueda de la eficacia la BRILOG aporta nuevamente valor añadido para el conjunto del Ejército puesto que es una estructura de mando y control logístico que sabe, quiere y puede determinar las necesidades de apoyo de nuestras unidades y las posibilidades reales de satisfacerlas en cualquier tipo de escenario y sea cual sea la entidad del contingente a apoyar.

La experiencia del Cuartel General de la BRILOG permite asegurar la coordinación entre las cadenas operativas y funcionales que se establecen en los diferentes escenarios de actuación. Las capacidades de sus Agrupaciones como elementos logísticos desplegables son insustituibles en operaciones puesto que enlazan, en el nivel de ejecución y sobre el terreno, el apoyo necesario para las unidades ejecutantes con las capacidades de territorio nacional, que no son desplegables y que por su naturaleza pudieran ser proporcionadas por medios no militares.

Esta experiencia se ha probado en ejercicios tanto a nivel Cuartel General BRILOG, como en ejercicios de Complejo Logístico de Apoyo General (COLAG), u otros de entidad menor pero igualmente necesarios y provechosos en apoyo a diferentes mandos y unidades. El adiestramiento a diferentes niveles ha permitido, en los casi tres años de existencia de la Brigada, obtener una importante capacidad de mando y control logístico en operaciones de cualquier tipo y capaz de responder a diferentes situaciones y planteamientos operativos.

Es importante mencionar el papel jugado por BRILOG en la generación y preparación de contingentes logísticos siguiendo las directrices de la Fuerza Logística Operativa como unidad superior. Estos procesos no siempre sencillos permiten una colaboración constante con el resto de unidades y materializan la estrecha relación que debe existir entre unidades de combate y unidades logísticas, así como un profundo conocimiento de las necesidades reales de las unidades y de sus unidades de apoyo logístico orgánicas.

No debemos olvidar un elemento esencial para la BRILOG y que es un factor a veces olvidado del esquema de apoyo logístico como es la experiencia contrastada en el planeamiento y ejecución de apoyos de nación anfitriona (HNS – Host Nation Support). Desde el Cuartel General de Zaragoza se ha obtenido una importante experiencia en este sentido que se ha materializado en el pasado con el apoyo a grandes ejercicios internacionales en el marco de organizaciones en las que España se integra, como ha sido el caso del Eurocuerpo, y se perfecciona periódicamente con el apoyo a contingentes extranjeros de entidad variable que se adiestran en cooperación con unidades españolas en el campo de San Gregorio.

Volviendo al símil con el que comenzábamos, nuestra rueda interior es esencial no sólo para asegurar el funcionamiento del conjunto sino para potenciar y proporcionar valor añadido a las capacidades del resto. Así como en nuestra vida diaria todo está impregnado de actividades logísticas en mayor o menor medida, en el caso de las operaciones militares su papel es esencial como el único engranaje que si no funciona correctamente impedirá el funcionamiento de la rueda. La Brigada Logística asegura ese funcionamiento aprovechando al máximo los recursos disponibles y proporcionando un valor añadido esencial en la búsqueda de la eficiencia diaria y la eficacia en operaciones.

Zaragoza, 12 de junio de 2013.

[1] Citado por MG Martin S. White. GULF LOGISTICS. BLACKADDER´S WAR. Brassey´s. 1995.

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